Diseño de ascensor exterior a base de estructura metálica para eliminar una posible barrera arquitectónica.
Elevándose a más de 20 metros para dar solución a dificultades de movilidad.
La singularidad de este diseño radica en las piezas vertebradoras con forma de púa de guitarra que dan lugar a unos aleros aleatorios.
Visualmente crean un efecto excéntrico, pero realmente son aleros que van alternándose de forma organizada girando sobre su centro de gravedad y uniéndose a los largueros horizontes a lo largo de la torre del ascensor.
Siendo todo ello compatible con el carácter autoportante de la estructura.